El viento respira entre los árboles,
se perforan sus troncos
con intrincadas historias interminables.
Se escucha en medio de la noche,
en medio de los sueños y de la tierra
un grito que me recuerda al choque de tantas vidas
que exploran el sentido del agua y el fuego.
No hay hombre que pueda evitar el desgaste de la sombra
Entonces se funde, se dilata y se derrama el magnífico brillo que arde.
Ha Amanecido.

Olga Maria Saín
©Derechos reservados


Comentarios