De rojos intensos

Hoy mi suerte liberadora
se viste de inmensidad
y de latidos sensoriales,
de sentires neurales,
estrellas párvulas
de supernovas bellas
íluminando querencias,
labios y existencias
de rojos intensos.

Y todas mis vidas disueltas
en hermosos periodos,
de hembra, madre y felina
sucediéndose una a una;
sin embargo, sólo algunas dieron a luz.

De rojos intensos,
la sangre de mi sangre
de nuestra sangre,
de todas las sangres;
mi vida exquisita, la fe de mi muerte,
mis hijas, mis padres,
mis amores, mis amantes,
mi pluma, mis letras,
mi voz, mi conciencia,
mis caricias, mis guerras.

De rojos intensos,
el perdón, la soberbia, alegrías y penas,
la maternidad, mi adolescencia;
como brillo en la niebla de rojos intensos,
recintos, lugares, paisajes, personas,
el mar, animales, mi catre, mi vela,
mi árbol, los versos que me pueblan
abrazos en la carne y el amor por mi tierra.

Aquello y todo esto es solamente una historia
que se ha escrito en mi memoria
con palpitaciones de rojos intensos.

Olga Maria Sain
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