Con mi parte abro el todo, con mis modos, te invito,

con mi fe llamo a la tuya,
con mi historia reveo y aprendo con quién quiero seguir escribiéndola.
Y aquí estoy bebiéndome el sinsentido de quererte y quererme al hacerlo.
Con el sentimiento a flor de piel dando espacio a mis palabras.
El alma extraña lo que el cuerpo no concede.
Ella sabe, comprende que hay una instancia para cada paso.
Ven despacio.
No hay apremio, no hay apuro.
Ya hemos sido en el sueño.
Y estamos construyéndonos en la realidad.

Olga Sain .
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